Seguir a @InmigracinmasDe Inmigración+Delincuencia: La banda desarticulada por desvalijar estancos iba a fijar su base en Arroyo para robar en todo el noroeste del país

INMMIGRANTE LADRON SE RIE DE LA LEY ESPAÑOLA

viernes, 13 de abril de 2012

La banda desarticulada por desvalijar estancos iba a fijar su base en Arroyo para robar en todo el noroeste del país

El grupo, especializado en asaltos en zonas rurales, acababa de mover su piso franco de la capital a La Flecha



El grupo estaba tan especializado que conseguía beneficios millonarios al instante nada más cometer los robos. Los investigadores les atribuyen un mínimo de 25 asaltos con premeditación, nocturnidad y alevosía cometidos en nada menos que trece provincias. Para ello utilizaban dos bases de operaciones: la principal se encontraba en la localidad madrileña de Torrejón de Ardoz (muy bien comunicada por autovía) y una pequeña sucursal se encontraba en la capital vallisoletana. Esta última la acababan de trasladar a La Flecha para cometer desde allí con más agilidad los robos en las zonas rurales de las comunidades del noroeste del país.
El mazazo policial a esta banda procedente de la Europa del Este llegó justo a tiempo. Los tres primeros integrantes de la «célula» vallisoletana fueron sorprendidos en plena mudanza desde su piso franco, establecido en la calle Lago de Sanabria (con salida a la ronda interior en las inmediaciones del nuevo hospital Río Hortega), a otro con mejores comunicaciones aún en la calle La Luz de La Flecha (Arroyo).
La operación, en la que participaron decenas de agentes de forma simultánea en Torrejón y Valladolid, se desarrolló el 26 de marzo. Los policías consiguieron detener de un plumazo a catorce presuntos integrantes de la banda –once en el municipio madrileño y tres más entre la capital y La Flecha– y a diez comerciantes acusados de receptación, todos ellos propietarios de negocios en Madrid. Ellos eran los encargados de adquirir la mercancía robada para luego venderla a precios más bajos, sobre todo, en comercios minoristas regentados por ciudadanos asiáticos e, incluso, a distribuidores de bares y quioscos.
«Casi siempre fijaban sus objetivos en estancos de las zonas rurales al entender que están más desprotegidos que los de las capitales y por eso tenían planeado llevar a muchas más gente al piso franco desmantelado en La Flecha para poder operar con agilidad en ese entorno», reconocen fuentes del grupo contra la delincuencia del Este de la Comisaría Central de Madrid.
Dos asaltos en la provincia
Los tres delincuentes afincados desde hace cerca de un año inicialmente en la capital son sospechosos de haber desvalijado –en algunos casos puede que con ayuda llegada de fuera– hasta dos asaltos a estancos desde el verano pasado en Cigales y la capital vallisoletana –es el único delito que se les atribuye fuera de los núcleos rurales– y otros dos en pueblos de León y Ávila. Eso como mínimo, ya que el grupo también es sospechoso de desvalijar locales en provincias y comunidades limítrofes como Vizcaya, Orense o Cantabria, que se encontraban dentro de su ámbito de actuación.
En cuanto tenían el botín –nunca tardaban más de diez minutos– avisaban de inmediato a su jefe y este a su vez preparaba el almacén de Torrejón de Ardoz para recibir la mercancía y avisaba a los receptadores para que acudieran de inmediato a recoger su partida. Un negocio más que rápido y lucrativo con el que los delincuentes consiguieron obtener unas ganancias de 1,8 millones de euros en apenas nueve meses, los que pasaron desde el inicio de la oleada de robos en julio del año pasado hasta la desarticulación del grupo el 26 de marzo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

'UA-28221391-1']);