La Guardia Civil ha intervenido 1.200 kilos de hachís que se ocultaban en una furgoneta interceptada en la A-92, en el término municipal de Baza (Granada), cuyo conductor fue detenido después de que huyera de los agentes, que lo encontraron encaramado a una encina.
El arrestado es un marroquí de 31 años que vive en la localidad barcelonesa de Sabadell y que ya fue detenido en 2010 en la provincia de Valencia por tráfico de drogas, ha informado hoy la Guardia Civil en un comunicado.
La actuación comenzó sobre las 15.30 horas de ayer, cuando una patrulla de Tráfico que circulaba por el punto kilométrico 32 de la A-92N presenció cómo el conductor de una furgoneta empezó a acelerar y a adelantar a otros vehículos "de forma poco ortodoxa" al percatarse de la presencia de la Guardia Civil.
Los agentes comprobaron que la furgoneta no había pasado la ITV y creyeron en un primer momento que el conductor huía por ese motivo, por lo que le dieron alcance y le instaron a éste a que parara para notificarle la denuncia.
El conductor detuvo la furgoneta en el arcén, justo donde comienza el carril de desaceleración, con el motor en marcha y sin freno de mano, y de ella salieron dos hombres que huyeron corriendo y se perdieron entre unas encinas del lugar.
La Guardia Civil comprobó que la furgoneta estaba cargada con numerosos fardos de hachís que arrojaron un peso final de 1.200 kilos, y detuvo finalmente a uno de los huidos, al que descubrió encaramado a una encina.
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